La larga ruta que conecta de Cómpeta a Canillas de Aceituno, tiene una extensión de 25 kilómetros y una duración de 9 horas aproximadamente; pero, que se hace muy amena gracias a los maravillosos paisajes y lugares que nos brinda éste a lo largo de toda su trayectoria.
Este recorrido atraviesa tres localidades de la Axarquía (además de Cómpeta y Canillas de Aceituno): Canillas de Albaida, Salares y Sedella. En los que podrás hacer paradas a lo largo del recorrido para comer, hacer descansos, visitar sus lugares más emblemáticos, etc. También la ruta se puede llevar a cabo al gusto de uno, puede acabar antes o después, usando las localidades como metas.
El camino comienza en Cómpeta (o si lo hacemos al contrario en Canillas de Aceituno) en Cómpeta comienza desde una pequeña ermita situada en la calle San Antonio. La primera etapa del camino transcurre el trayecto de 2,5 kilómetros entre Cómpeta y Canillas de Albaida; un sendero repleto de olivares, enebros, romeros... Algo más adelante de éste se cruza la carretera que lleva a la cantera de Canillas de Albaida, pero el sendero continúa directamente hacia el pueblo.
Se puede entrar en Canillas de Albaida si queremos visitarlo, pero si queremos continuar el recorrido, bajaremos por una cuesta situada al lado de la ermita de Santa Ana, llegando a la Cuesta de la Puente, situados ya a 3 kilómetros desde el comienzo de la ruta.
Bajando la cuesta de la Puente llegamos al puente Romano, desde ahí comienza un ascenso situado en un camino histórico restaurado, durante unos kilómetros se camina hacia la Cruz del Muerto, a 7 kilómetros desde el comienzo de la ruta. Siguiendo el camino, entramos en el Parque Natural de las sierras Tejeda, Alhama y Almijara, atravesando un paraje repleto de una flora muy diversa típicamente mediterránea.
Siguiendo el recorrido se abandona este paraje forestal tras unos 2 kilómetros para bajar por el camino de la Solana de la Casa Haro, un cortijo en ruinas que marca el kilómetro 9 de la ruta, conocido como la Umbría de la Casa Haro; hasta el arroyo de los Álamos un afluyente del cercano río a Salares.
El camino llega a Salares, alcanzando el kilómetro 11 por el puente árabe de la localidad.
Desde Salares salimos por el norte, por la zona del Encinar, ascendiendo hasta Benescalera, la Fuente de Ocaña, y el Cerro Marchena por una subida empinada.
Desde allí, cerca de un pequeño bosque, a 14 kilómetros del inicio del recorrido llegamos a la Hoya de Salamanca, desde aquí se desciende buscando el Cortijo de la Herriza y el arroyo que en la parte final llega a Sedella.
Llegando a Sedella podemos hacer otra parada; en lo alto del pueblo, encima del Cerro del Hundidero continúa el sendero, acompañado de una acequia que conduce al Molino de Montosa, habiendo recorrido ya más de 18 kilómetros del recorrido.
Recorremos 4 kilómetros dejando atrás las desviaciones de Rubite y los Valverdes; cuando ya se tiene a la vista el caserío de Canillas de Aceituno, cerca del cerro de Rompealbandas, realizamos una bajada hasta el río Almanchares.
A partir de aquí subimos la cuesta del Molinillo, el molino al que hace referencia su nombre se ve al tomar la senda de subida.
Al seguir ascendiendo se ve la Hoya del Alcornocal, el pequeño trayecto del final del camino con numerosos olivos y plagado de casas que culminan la entrada a Canillas de Aceituno.
Aquí finaliza nuestra etapa de 25 kilómetros; y, o bien, habrá alguien esperándonos o tendremos que deshacer el camino andando nuevamente hasta Cómpeta.